PATOLOGÍAS ETOLÓGICAS
La etología es la ciencia que estudia los trastornos del comportamiento de los animales; nos centraremos en las conductas más frecuentes en perros y en gatos
En los primeros existe mayor tendencia a la agresividad, ansiedad por separación, fobias, relaciones con la reproducción; y en los segundos se da más comúnmente la micción inadecuada, la agresividad, el marcaje de las uñas y las estereotipias.
Conductas Problemáticas Frecuentes En Perros
Agresividad
Para poder tratar las conductas agresivas es necesario conocer el origen, de manera que puedan ser diagnosticadas y tratadas con exactitud. Para ello se pasa un cuestionario a los propietarios para que especifiquen la secuencia de la acción agresiva del paciente. El tratamiento va a depender de las causas del comportamiento agresivo. Mediante un sistema de recompensas se trata de reconducir la conducta del animal. Si los castigos no son aplicados en el momento que se produce el comportamiento agresivo la conducta se inhibe. Si el animal presenta una conducta agresiva-dominante se emplearán técnicas de regresión jerárquica en las que se hace comprender al animal que no es el líder de la manada. Se trata de relegar al animal a la periferia del grupo evitando confrontaciones directas con los dueños.
La técnica de desensibilización-contracondicionamiento es positiva en episodios agresivos en los que se conoce el origen desencadenante. Para ello se relaja al animal y se le presenta el objeto. Si la conducta agresiva es inhibida se le premiará.
Ansiedad por separación
Cuando el animal se siente solo en casa o abandonado muestra un cuadro de llantos, quejidos y destrozo de mobiliario como respuesta a un comportamiento descontrolado.
Este cuadro de ansiedad no se resuelve mediante castigos, ya que estos aumentarían el estado de nerviosismo, sino que habrá que desensibilizar al animal durante sesiones de tratamiento que ayuden a relajarlo ante estas situaciones mediante ausencias breves del propietario hasta ir prolongando el tiempo. Una técnica complementaria a esta es la administración silenciosa de comida. Asociar mediante estímulo positivo la salida del dueño con la obtención de comida en el comedero
Los fármacos psicotrópicos solo se usarán mediante prescripción veterinaria para reducir la agresividad. Si la agresividad es de origen hormonal la castración disminuye este comportamiento.
Un factor que ayuda a la relación del animal ante ciertos comportamientos es la realización de ejercicio físico.
Fobias
El miedo en el animal es una respuesta natural ante estímulos que le provocan un sentimiento de amenaza. Sentir miedo es una respuesta fisiológica de supervivencia, pero una fobia fuera de una situación de peligro es una patología conductual que debe ser tratada mediante técnicas progresivas de enfrentamiento al objeto desencadenante con respuesta positiva gratificante
Micción inadecuada
La orina es una técnica de marcaje de territorio del gato. La complicación de esta valoración de esta conducta reside en identificar correctamente si se trata de una conducta normal, de marcaje o de suciedad del animal.
Cuando la orina se encuentra en superficies verticales, en zonas de puertas y ventanas, en juguetes o en lugares visibles el animal está marcando su territorio. La castración resuelve en un 95% de los casos el problema de la marcación. Además, existen tratamientos farmacológicos que inhiben esta conducta.
También resulta eficaz en dueños que permanecen tiempo en casa observar la conducta del animal y en el momento de miccionar provocar un estímulo negativo que le haga abandonar la acción (ruido, pistola de agua…).
La micción no relacionada con el marcaje puede ser debida a múltiples factores como la intolerancia del gato a la grava de la bandeja o al olor que desprende esta. En cualquier caso, el animal debe aprender cual es el lugar destinado a la micción y excreción.
Agresividad
La agresividad supone el 30% de los problemas conductuales del gato. La agresividad puede darse entre machos, por el territorio, el alimento, el juego, el miedo, durante el acicalado o por comportamiento maternal.
Agresividad entre machos: se observa en gatos entre los 9 meses y los 3 años en la época de celo de las hembras. Si ninguno de los contrincantes desiste se producen varios combates que no suelen ser mortales, pero provocan graves heridas que pueden dar lugar a infecciones. La castración es el tratamiento más efectivo.
Agresividad por el territorio: este comportamiento suele darse con la llegada de un nuevo gato que es expulsado por el anterior. Es un comportamiento difícil de tratar ya que solo puede producirse acercamiento por ambas partes de manera progresiva y en ambientes relajados.
Agresividad depredadora: a partir de los cuatro meses presentan acciones de depredación por el placer del instinto y no por hambre. Este comportamiento solo puede corregirse mediante técnicas de castigo en el momento que se produce la acción.
Agresividad en el juego: hay que enseñar a los gatos a jugar con sus objetos y no morder ni sacar las uñas en el tiempo de juego.
Agresividad por miedo: en las situaciones en las que el gato se ve amenazado tiende a mostrase agresivo.
Agresividad durante el acicalado: los gatos no toleran que se les moleste mientras se acicalan ni que el dueño preste atenciones cariñosas. Es un animal arisco en este sentido. Hay que evitar que permanezca largo tiempo acicalándose para eliminar la situación de excitación agresiva.
Agresividad por comportamiento maternal: comportamiento instintivo en el que la madre no permite que nadie se acerque a las crías. Se aconseja no acercarse a estas.
Marcaje con las uñas
El arañado del gato en los objetos cumple una doble finalidad: marcaje visual y olfativo de su territorio y limado de las uñas. Para eliminar la conducta de la lima en lugares no deseados hay que proporcionar juguetes destinados a este fin en la gatera. También se pueden emplear fundas para las uñas de los gatos o, si se permanece bastante tiempo con el animal, inhibirlo de la acción con un estímulo negativo. La mutilación de las uñas para eliminar este comportamiento no es una acción ética.
Estereotipias
Las estereotipias son conductas repetitivas y constantes que no cumplen ningún propósito pero que provocan placer en el animal lo que hace difícil que cesen en su realización. Las estereotipias más frecuentes son:
- Dermatitis psicógena: lamido obsesivo que puede provocar lesiones
- Alucinaciones: mirar un punto fijo, perseguir objetos inexistentes y pupilas dilatadas.
- Comida y bebida: polidipsia, polifagia, succión de prendas de lana…
- Locomoción: agitaciones bruscas, saltos, giros en círculo…
- Vocalización: maullidos, gemidos…
- Neurológicas: mordedura obsesiva de la cola, agresión a una persona…